jueves, enero 31, 2008

Actualización en CineTren: Las normas de la casa de la sidra

El reciente comentario sobre la película En el Valle de Elah, me hizo revisar la filmografía de su guapa actriz protagonista, Charlize Theron. Una de las películas de esta actriz que más me llamó la atención, tanto por lo que me gustó el filme como por lo guapa que salía la sudafricana fue Las normas de la casa de la sidra. Pero también me gustó en dicha película las películas de ambiente ferroviario que en ella salían. En la boscosa región norte de Nueva Inglaterra, en el estado de Maine, salía un bonito tren de madera tirado por una imponente locomotora de vapor.

Por todo ello, he actualizado mi página sobre el ferrocarril en el cine con una reseña sobre esta película de Lasse Hallström. Si os apetece no dudéis en visitar el artículo.

La entrada de hoy queda ilustrada por una imagen de una imponente locomotora tipo Garratt 462 en el Museo del Ferrocarril de Villanueva y Geltrú.

462-0401bn

(Canon EOS 100; EF 28-135/3,5-5,6 IS USM)

martes, enero 29, 2008

En busca del negativo perdido y los amores de Ingrid Bergman

Varios de los blogs sobre fotografía que sigo habitualmente, como T.O.P. y Foto36, se hacían eco de una noticia aparecida en The NY Times recientemente sobre el descubrimiento en Méjico de varios miles de negativos de Robert Capa tomados durante su seguimiento de la Guerra Civil española. No sólo hay negativos de Capa. También encontramos negativos de Chim y de Gerda Taro. Parece ser que los negativos fueron dejados en París cuando el fotógrafo abandonó Europa ante el avance alemán en 1940. Creyó hasta su muerte que se habían perdido. Pero parece ser que tras numerosas peripecias, consiguieron salvarse, y muchos años más tarde, reaparecer en buen estado, tal y como parece que han confirmado los técnicos de Eastman Kodak.

Por un lado, este descubrimiento es una excelente noticia para la conservación del patrimonio histórico de la fotografía y también, dándole la vuelta a la cosa, para la conservación del patrimonio fotográfico de la historia. Pero por otro, nos puede hacer reflexionar sobre otra cosa. Los viejos negativos fotográficos han mostrado en numerosas ocasiones su capacidad para resistir todo tipo de peripecias y durar en el tiempo. Pero… ¿los archivos digitales resistirán igualmente? ¿Estamos condenados a perder la mayor parte del patrimonio fotográfico que actualmente se está generando por la volatidad de los datos electrónicos? Interesante cuestión.

Un poco de cotilleo. Mientras releo algunas de las cuestiones relacionadas con Capa, veo que fue amante de Ingrid Bergman, quien quiso llevarle al altar, cosa que no consiguió porque el permaneció fiel a su compañera Gerda Taro, que murió en Brunete durante la contienda civil española. Por un lado, qué envidia, y por otro, qué romántico. También leo que esta pareja, la Bergman y Capa, sirvieron de inspiración a Hitchcock para la pareja protagonista de Rear Window, interpretada por Grace Kelly y James Stewart. Cómo me gusta; todo se interrelaciona. Todo tiene que ver. Todo es un todo.

En la foto de hoy, una vista de las playas del desembarco de Normandía, donde también estuvo Robert Capa.

En las playas del desembarco
(Pentax P30N; Sigma 28-70/3,5-4,5)

lunes, enero 28, 2008

En el Valle de Elah (2008)

En el Valle de Elah (In The Valley of Elah, 2008), 27 de enero de 2008

Cuando uno se entera de que estrenan una película protagonizada por Tommy Lee Jones, Charlize Theron y Susan Sarandon, le entran muchas ganas de ir al cine. Si además te enteras que el director es Paul Haggis, quien ya nos ofreció una cinematográficamente interesante aunque ideológicamente confusa Crash,… pues aún parece que te interesa más todavía. Si las críticas que lees son muy positivas,… entonces empieza a dar miedo la cosa. Se crean unas expectativas muy elevadas, y el riesgo de desilusión aumenta exponencialmente. Son las cosas del cine. Pero es necesario ir. Y si hay que ir, se va.

La historia es la de la investigación de la muerte violenta de un soldado recién llegado de Iraq en los alrededores de la base donde se encuentra acuartelado. La investigación se lleva a cabo en diversos momentos por la policía militar, para pasar luego a la jurisdicción civil por una iniciativa de una inspectora de policía con problemas de integración laboral (Charlize Theron), y en todo momento por el padre del soldado (Tommy Lee Jones), un militar retirado, que quiere recuperar la memoria del hijo, de quien se sospecha pudiese estar relacionado con el consumo y el tráfico de drogas. La acción transcurre pausadamente mientras nos enteramos de cosas,… que no necesariamente tienen que ver con el investigación. Esta pasa a ser un marco adecuado para que realizar un reflexión sobre las consecuencias éticas y morales de la Guerra de Iraq en particular, y de cualquier guerra en general. La película va poniendo en cuestión la pérdida de valores de una sociedad desorientada y con problemas. El plano final de la película con una bandera norteamericana ondeando al viento de una determinada forma es una auténtica declaración de lo que concluye el filme. Por cierto, debe ser la única ocasión de que un final con bandera al viento me ha gustado. Y mucho.

La película está basada en hechos reales, aunque los nombres y las circunstancias están alterados. En esta ocasión, no hay confusión ideológica. Está claro que Haggis promueve una intensa crítica de lo que pasa en torno a ese disparate que es la invasión de Iraq por parte de los EE.UU. y sus aliados, así como en lo que se está convirtiendo el ejército norteamericano.

Un elemento importante en la credibilidad del filme es la impecable actuación de los intérpretes. Jones se mueve con la soltura y competencia que le caracteriza. Aparece mayor, triste, casi derrotado. Ha perdido a dos hijos en el ejército. Sólo le quedan las profundas y conservadoras convicciones del viejo sargento de la policía militar. Convicciones que pasarán una dura prueba conforme vaya tomando conciencia de lo que en estos momentos es la institución en la que sirvió. De fondo tiene a su esposa (Susan Sarandon) como amarga voz de la conciencia. También es muy convincente el papel de Theron como inspectora de policía. La sudafricana abandona el glamour de muchos de sus papeles, se recoge el pelo, evita el maquillaje, y a cara descubierta intenta reencontrar su punto de honestidad, su razón de ser, demostrar a los demás que es algo más que un capricho, abandonado, de su jefe.

En resumen, una película de gran calidad, altamente recomendable salvo por los que entiendan que el cine es algo para pasar el rato comiendo palomitas. Yo le pongo un ocho, con idéntica nota en la interpretación y un siete en la dirección.

Con una muerte por el medio, no parecerá mal que ilustre esta entrada con una de mis recientes fotografías en el cementerio de Zaragoza.

Cruces y cipreses

(Pentax K10D; SMC-A 100/4 Macro)

domingo, enero 27, 2008

Una tarde en el cementerio

Cuando salgo de viaje por el mundo, en mis vacaciones, no faltan las ocasiones en las que nos asomamos a los cementerios por cuyas cercanías pasamos. En buena parte de las ciudades del norte de Europa, los cementerios son lugares verdes, arbolados, situados en parques o en los alrededores de las iglesias. Y no faltan las ocasiones fotográficas en dichos entornos.



Ilfracombe, Devon (Inglaterra)
Fujifilm Finepix F10



Ruovesi (Finlandia)
Panasonic Lumix LX2



Archipiélago de Turku (Finlandia)
Panasonic Lumix LX2

En España, los cementerios son distintos. Más apiñados, menos verdes, menos parques. Además, en los últimos tiempos en las grandes y no tan grandes ciudades se han puesto de moda los nichos, en los cuales se apilan de forma funcional pero altamente anti-estética los ataudes de los fallecidos.

No obstante, ayer por la tarde decidí dar una oportunidad al cementerio de Zaragoza. Aprovechando que la niebla levantó al mediodía, tome la cámara por la tarde, para aprovechar la última hora de sol antes del ocaso. Me centré en la área donde se enterraba en tierra, en el entorno de las grandes tumbas familiares. Pero también me introduje entre las tumbas más pequeñas y modestas.

Familia de Perez Abenia

¿Será Dios? Cristo está a su derecha,...

Sin embargo, lo que más me impresiona siempre es ver la cantidad de tumbas en tierra dedicadas a los niños. Edades del estilo de 9 años, 30 meses, 27 días o algunas horas son relativamente frecuentes. Y a pesar de que las fechas de fallecimiento datan de algunas décadas, son las que con más frecuencia encuentras ornadas con flores relativamente recientes. Eran otros tiempos, en las décadas de los 50 y los 60, donde además de babyboom, también había una considerable mortalidad infantil, de la que hoy en día afortunadamente nos hemos liberado.

En resumen, una interesante experiencia. Fotográfica y sociológica.

Subio a la gloria

Todas las fotos actuales:
Pentax K10D con
SMC-DA 21/3,2 y SMC-A 50/2

sábado, enero 26, 2008

Noticias del sábado: Catástrofes financieras globales y elecciones en el vecidanrio

Esta semana he estado virtualmente fuera del mundo. Aparte de mi habitual horario laboral que me ocupa todas las mañanas, he tenido que impartir clases en un curso y eso me ha obligado a dedicar buena parte de las tardes a esta noble tarea de colaborar a la formación de otros compañeros. Noble tarea que me deja hecho polvo y con pocas ganas de hacer nada cuando llego a casa salvo unos cuantos "largos de sofá", ver un ratico la tele e irme a dormir una hora antes de lo habitual. Así que no he aparecido por aquí para contar nada.

Eso sí, he escuchado más la radio para intentar mantener contacto con la realidad. Con alguna realidad. Quizá lo más llamativo ha sido los vaivenes de las bolsas, con pérdidas tremendas algunos días, que se han podido recuperar otros. Escucho hace unos días a unos contertulios radiofónicos que buena parte de estos terremotos financieros y económicos se debe a la política financiera en EE.UU. Ya se había dicho. Cuando la economía yanqui se acatarra, la economía mundial pilla una pulmonía. Es lo que hay.

Poco a poco, van apareciendo noticias indicando que las vacas gordas se han ido de vacaciones en este país. También son ganas de fastidiar. Al gobierno digo. Justo ahora que llegan las elecciones. Son las ironías del sistema capitalista actual. Un gobierno puede pagar el pato de las políticas que se hacen allende los mares o allende los Pirineos. La mayor parte de las decisiones que determinan como va a ir la economía se toman en Washington o en Bruselas. Y ahora viene la gran ironía. Como consecuencia de las malhadadas decisiones de un gobierno inepto como el de George W. Bush, nos podemos encontrar que el beneficiado electoralmente sea un partido que admira a este señor y que pretenderá imitar sus acciones de gobierno.

¿No han pensado ustedes nunca en bajarse de este estúpido tranvía que es la "sociedad occidental"? Yo sí. Es que nunca he sabido dónde me lleva. A lo mejor es eso. Que no lleva a ninguna parte.

En la foto de hoy, el poder económico que impregna cada rincón de nuestras ciudades. Incluso en un rincón tan recogido como la Plaza de Santa Ana en Zaragoza, un domingo de enero por la mañana.

Vienen

Canon EOS 10D
EF 70-210/3,5-4,5 USM

lunes, enero 21, 2008

Los crímenes de Oxford (2008)

Los crímenes de Oxford (2008), 20 de enero de 2008.

Dudas me han entrado a la hora de encabezar esta entrada sobre sí debía consignar el título original de la película como The Oxford Murders. Al fin y al cabo, el filme está rodado en inglés, en Inglaterra y con un ambiente muy británico. Pero asumiremos que la película es española, y que su título original es en castellano.

Pues esto va de que a Alex de la Iglesia le da una ventolera y se pone a hacer una película que no tiene nada que ver con el cine al que habitualmente nos tiene acostumbrados. Este director tiene algunos títulos que me parecen estupendos y otros que no. En realidad, si miro su filmografía, en lo que se refiere a largometrajes, sólo hay dos que me parece que tienen algo para que se le dé la importancia que se le da en la filmografía española actual. Y son El Día de la Bestia y La Comunidad. Ambas me parecen geniales. Pero las demás... ¡uffff! Una de dos. O está sobrevalorado, o tiene poco atino a la hora de mostrar su genialidad.

El filme que aquí nos ocupa pretende ser su punta de lanza para el cine anglosajón. Bueno... ¿Y Perdita Durango, qué? ¿Nos hemos olvidado que aquella también se rodó en inglés? También se habla de un homenaje a Hitchcock. Mmmmmmmmm... Es cierto que es una película de misterio. De asesinatos por resolver. Es cierto que algunos planos y algunas secuencias tienen mucho de lo que hacía el viejo maestro. Pero ¿es esto un homenaje o mera imitación coyuntural y aprovechada? El viejo maestro nos mantenía en vilo simplemente con el acoso a un personaje, con la incertidumbre de los destinos de los protagonistas. El presunto motivo de esa incertidumbre, el McGuffin, era absolutamente secundario. Un polvo negro en Notorious, una persecución no sé sabe muy bien porqué en North by Northwest,... Eso no importaba nada. Aquí nos dan una brasa aterradora con la lógica, las matemáticas, la maldita sucesión de Fibonacci. Lo de la sucesión de Fibonacci parece que se lo han aprendido en jueves. Sale hasta en la sopa. Incluso aquí se equivocan un mogollón cuando el protagonista dice que cree en el número pi, cuando el número asociado a la sucesión de Fibonacci es el número phi. Vamos mal en matemáticas y en letras. Largas parrafadas de frases sin sentido para la mayor parte de los espectadores y que son superfluas a la hora de crear ambiente. El resultado es una melange inconsistente entre las historias tipo códigodavincianas y las novelas de Agatha Christie. Juro que a mí me parece que esta historia tiene más de los whodunit de la prolífica escritoria británica que al suspense del maestro del cine de la misma nacionalidad.

Técnicamente,... pues sí, el director tiene recursos. Pero no sé si los sabe aprovechar. Imagino que habrá quien admirará el largo traveling que nos lleva de los desengaños del joven posgraduado hasta el lugar del primer crimen. Pero aparte de presentarnos a algunos de los personajes, que ya habían sido presentados, no acabo de verle la gracia. Nada que ver, por ejemplo, con el largo traveling que se puede disfrutar en Atonement para mostrar el ambiente de la playa de Dunkerke durante la II Guerra Mundial. Por poner un ejemplo de hace una semana escasa.

En cuanto a la interpretación. El joven posgraduado interpretado por Elijah Wood convence más bien poco. La enfermera que se lo liga, las española Leonor Watling, da lugar a una relación más o menos apasionado que nadie sabe por qué surge ni adonde va, ni si importa gran cosa. Por otra parte, esta chica es guapa, y además con poco recato a la hora de despelotarse, y me cae bien. Pero no acabo de verle mucho como gran actriz. Siempre me ha parecido que flirtea con la mediocridad. El viejo filósofo y matemático, John Hurt, hace lo que puede, que es mucho, pero poco más allá. Desde mi punto de vista, habría que cesar al responsable del casting. Hay otros actores que no lo hacen mal. Pero salen poco, y poco pueden hacer.

En resumen. Una película muy floja. Más de lo que la prensa especializada reconoce. Supongo que el nombre del director influye. Yo no le pongo más de un cinco en la valoración subjetiva, con una seis en la interpretación y otro en la dirección. Si podéis elegir, elegir otra película.

En la fotografía de hoy,... qué va a ser. Oxford. La foto es de 1989. No me acuerdo ni de cerca qué es. Si alguien lo sabe, que lo diga.

Pentax P30n
Focal: 28mm
Negativo color 100 ISO

sábado, enero 19, 2008

Noticias del sábado: Sabíamos que iban a llegar, pero aun así nos abruman (las elecciones, digo)

Una vez terminada la campaña prepreelectoral, estamos ya inmersos de lleno en campaña preelectoral, que dará lugar dentro de un tiempo a las dos semanas de campaña electoral. Todos sabíamos que esto iba a suceder, pero no por ello nos sentimos menos abrumados, ante la tabarra con la que nos castigan los partidos políticos. Suelen hablar de todo menos de lo que interesa al ciudadano, que tiene que tomar sus decisiones en este campo basadas en sus convicciones de base o por intuición. Por que lo que es por la información racional y verificable que lo que los candidatos ofrecen sobre lo que van a hacer.

Indudablemente, esta semana los titulares se los ha llevado la derecha. El candidato gallego la ha montado en dos fases. Primero anunciando el fichaje de un empresario muy conocido. Especialmente, por haber usado una empresa para hacer política. Y muy hábil para hacer felices a los accionistas. Quizá por eso lo han escogido. Para hacer felices a algunos accionistas. Es aragonés. Pero no ha querido presentarse en ninguna circunscripción aragonesa. Ni quiere venir a hacer campaña a Aragón. Dice que por respeto a sus amigos aragoneses de otros partidos políticos. Creo que hay dos razones más reales. Una, que en este país todavía hay mucha gente para la que sólo existe Madrid. La periferia no importa. Sólo la que amenaza con irse. Es un desprecio sistemático de los partidos políticos hacia lo que significa representar las aspiraciones de todos. Dos, que el partido al que va a representar va llevar políticas impopulares dentro de los límites del viejo reino. Y el señorito no quiere desgastarse con temas banales. Al tiempo.

La segunda fase del protagonismo del candidato gallego ha sido menos agradable para él y sus copartidarios. Han negado las posibilidades de un cierto alcalde para presentarse a estas elecciones. Volvemos a lo que decía antes. Como es el alcalde de Madrid y se quería presentar por Madrid, el follón está montado. Entonces se justifican muchas cosas. Por ejemplo, que no conviene que se compartan dos responsabilidades políticas en una persona. Pero claro, luego se encuentra que hay otras seis alcaldes en comunidades periféricas que sí se presentan. Da igual lo que se haga fuera de Madrid. Y se sorprenden de que florezcan los nacionalismos.

En la fotografía de hoy, un detalle tomado en el Casco Viejo de Zaragoza en una agradable mañana de domingo en enero.

Tradición
Canon EOS 10D
EF 70-210/3,5-4,5 USM
Focal: 145mm
ISO 400
Exposición: f/5,6 - 1/400s

jueves, enero 17, 2008

La insoportable levedad de las producciones históricas - The Tudors

Me recomendaron no hace mucho una producción televisiva, una serie de ficción de carácter histórico ambientada en la corte de Henry VIII. El famoso rey de las seis esposas. La serie se denomina The Tudors. Los Tudor, dicho al hispánico modo. En realidad, en esta primera temporada de la serie se le da vuelta a la historia tantas veces contada de la separación del monarca inglés de su primera esposa, Catalina de Aragón, para casarse con Anne Boleyn, una de las damas de compañía de la reina. La sospecha me entra de que si les va bien, pueden hacer una temporada de en torno a diez capítulos para cada una de las consortes. Supongo que la segunda temporada puede ir de su matrimonio con la "Bolena", hasta que esta pierde la cabeza... ¿por amor?

La producción de la serie, por lo menos en su primera temporada, es suntuosa. Decorados privilegiados, vestuario de lujo, abundancia de reparto y de extras, realización impecable. Los guiones varía. Hay algunos capítulos muy buenos y otros menos buenos; pero en general está muy bien. Se han buscado buenos actores, aunque algunos son poco conocidos. Pero otros tienen nombre, y he quedado particularmente impresionado del papel que hace Sam Neill interpretando al Cardenal Wolsey, Lord Canciller en ese período de tiempo. El personaje de Anne Boleyn esta interpretado por una casi desconocida Natalie Dormer, que une una gran belleza a una expresividad notable. Dice mucho con muy pocas palabras. Pero todos están muy bien, incluido el propio Jonathan Rhys Meyers interpretando al monarca, a Maria Doyle Kennedy como la reina de origen español, o a Jeremy Northam como Sir Thomas More.

La producción irlandeso-canadiense tira de escenas sexuales relativamente explícitas, especialmente en los primeros capítulos, supongo que como tirón para enganchar a la parroquia al televisor. Pero conforme los capítulos pasan, son otras las pasiones que importan en la historia. La ambición política, la avaricia, los celos, son los motores que mueven a los distintos personajes.

Y todo ello, está muy bien. Realmente bien. Pero...

Efectivamente, hay un pero. Es obvio que estas producciones tienen que partir de una "novelizacion" de los acontecimientos. Conocemos los hechos históricos públicos. Han llegado hasta nosotros alguna correspondencia de los personajes históricos narrando hechos más íntimos. Pero lo que realmente sucedió en las alcobas, en los comedores, en los salones, o en las recámaras ha de ser necesariamente inventado. Entiendo que esta ficción debe ser creible. Debe ser concordante con los hechos históricos. Debemos creer que las cosas pudieron suceder así. Ningún problema. Si sólo se narrase lo que realmente se conoce, sería un rollo y duraría un ratico. Pero lo que es inadmisible es que reinventen la historia. Que hechos conocidos sean falseados. Ninguna hemana del rey desposó ni mató a ningún rey portugués, que aparece como decrépito, lascivo y risible. Recordemos que la Casa de Avis portuguesa impulsó la exploración del mundo y configuró un imperio. Nada risible y sí mucho de admirable dadas las dimensiones del país. Nada indica que el Cardenal Wolsey terminase como termina en la serie. No hubo epidemias de esa categoría en esa época en Inglaterra; sí las hubo antes y después, pero no entonces, y parece que su única justificación es alargar un episodio más la serie. Las fechas y los acontecimientos no siempre concuerdan en la serie con lo que sucedió en la realidad. Y una serie de pequeños detalles que sería prolijo y probablemente aburrido buscar y detallar.

Siempre me preguntaré ¿por qué hacen esto? ¿Realmente creen que inventar o modificar cosas es necesario para que la historia sea interesante? Una pena. Porque por lo demás, la serie es altamente recomendable. A ser posible en versión original. No doblada.

¿Que otra foto de las que tengo podría poner en esta ocasión, distinta de la armadura de Henry VIII que se conserva en la White Tower de la Torre de Londres?

Canon EOS D60
Sigma 28/1,8
ISO 400
Exposición: f/1,8 - 1/50s

martes, enero 15, 2008

Expiación (2007)

Expiación (Atonement, 2007), 15 de enero de 2008.

Para empezar, el título completo en español es Expiación: Más allá de la pasión. Pero he decidido obviar ese "más allá de la pasión" en el título de la entrada, porque no sirve para nada y no induce más que a engaño. Cosa que no necesita este estupendo filme firmado por Joe Wright, basado en la novela Atonement del escritor británico Ian McEwan. Esto no es un culebrón de pasiones amorosas. Esto va de otra cosa. Va de las repercusiones de nuestros actos. De cómo afectan las vidas de quienes nos rodean. De cómo en un momento dado condicionan nuestra propia vida, e incluso hace necesarios actos de expiación de nuestras faltas.

Según la propaganda del distribuidor de la película esto van de los amoríos y pasiones de una señorita pija británica y del hijo del ama de llaves, protegido de la familia de bien, en la década de los 30 del siglo XX, en vísperas de la Guerra Mundial. La señorita pija está interpretada por Keyra Knightly y el "ceniciento" por James McAvoy. En realidad, estos personajes son secundarios. Secundarios de lujo, que se llevan buena parte de los minutos que dura la película, pero secundarios. Son los que sufren los actos de quien considero que es el auténtico protagonista del relato, la pequeña Briony, interpretada en su preadolescencia por Saoirse Ronan, en su juventud por Romola Garai, y ya anciana por Vanessa Redgrave.

No nos encontramos ante un relato de estructura convencional. La acción va y viene en el tiempo. Es necesario para poder comprender mejor lo que pasa por las mentes de los protagonistas, para entender que lo que vemos y percibimos no siempre es la realidad sino lo que queremos interpretar. Tampoco es convencional por... un motivo que sólo se comprende al final, aunque la secuencia de los hechos y los tiempos nos hagan sospechar durante la proyección. La realización por lo demás está muy cuidada; se sale de lo habitual. Toma sus riesgos. Tiene momentos muy poderosos visualmente, al mismo tiempo que una música acompañada por un peculiar instrumento de percusión, nos va dando pistas de lo que estamos viendo realmente.

La interpretación es suficientemente buena. La Knightly está mejor que lo habitual, y cumple sobradamente, aunque quiza hubiera hecho falta otra actriz con un poco más de solidez. Pero el físico lo da. McAvoy está mejor y cumple también sobradamente. El patito feo de la película, el personaje de Briony se luce menos por estar interpretado por tres actrices distintas y con unos tiempos limitados en pantalla en relación a la importancia del personaje, pero no hay nada que objetar a la interpretación, especialmente de las dos brionys jóvenes. La intervención de Redgrave, corta aunque trascendente, tiene un cariz que va más allá de lo meramente interpretativo, por lo que tiene de catártico para la resolución del relato.

Sólo había leído previamente una novela del escritor, y aunque me gustó, no me llevó a seguir buscando su compañía literaria. Pero ahora sí que me han entrado ganas de hincarle el diente a un relato que me imagino mucho más rico en su versión literaria.

En resumen, una película muy interesante y muy conveniente, que muestra que se pueden hacer todavía buenas adaptaciones de obras literarias al mismo tiempo que se cuidan los aspectos cinematográficos de la obra. Yo le pongo un ocho, con la misma nota a la dirección, y un siete en la interpretación.

La imagen de hoy, la soledad y la melancolía en las calles del Casco Viejo de Zaragoza.

Sola
Canon EOS 10D
EF 70-210/3,5-4,5 USM
Focal: 75mm
ISO 400
Exposición: f/5,6 - 1/400s

domingo, enero 13, 2008

Una nueva librería en la ciudad

En realidad hace ya unas semanas. Abrieron a tiempo para la campaña navideña. No sé exactamente cuándo. Pero hasta ayer no fui a conocer el nuevo establecimiento.

Cuando salgo de viaje por el extranjero, siempre me han dado mucha envidia las librerías que hay en muchas capitales. Algunas de ellas no mucho más grandes necesariamente que Zaragoza. Librerías de varios pisos, con estanterías llenas de títulos de lo más diverso, perfectamente organizados, encuentras en seguida lo que quieres, amplias, con agradables zonas para hojear los volúmenes antes de tomar la decisión de comprar o no comprar. En algunas de ellas no falta una cafetería, o cuando menos una zona con maquinitas para tomarte el café. No sólo es importante la literatura de ficción. En muchas de ellas, otro tipo de libros ocupan extensas estanterías. Siempre me paro un rato en la sección de fotografía. Claro.

Bien. Pues si me llama la atención todo esto, es porque lo hecho a faltar en mi ciudad. Una ciudad que, por tamaño, debería aspirar a disfrutar de varios establecimientos de estos. Las librerías más importantes y surtidas de la ciudad, no voy a mencionar nombres, suelen tener una estructura agobiante, y no siempre es fácil encontrar lo que buscas. Tal es así, que alguna cadena comercial orientada al ocio en general suele ser más visitada como librería a pesar de no estar especializada en el tema. Cierto es que no falta alguna librería más pequeña, con otro estilo, agradable de visitar como la Librería Cálamo (esta si la nombro; es mi preferida). Pero eso. No es la típica librería generalista. Está más especializada.

A lo que iba. La Casa del Libro ha abierto un establecimiento en la Calle de San Miguel y ayer fui a visitarlo. Tres pisos, amplios y bien organizados. Algunas zonas para sentarse. Una decoración despejada y luminosa. Se acerca a lo que me gustaría. No llega. Pero se acerca. Para inaugurarla me compré... un libro, claro está. África de Sebastião Salgado. Un libro de fotografías, que presenta una calidad impresionante sobre en la reproducción de las imágenes. Publicado por Taschen, tiene un precio razonable para la calidad que ofrece, como es propio de la editorial. Eso sí. Es grande, todavía no sé en que estante lo voy a poner.

La foto de hoy está recién salida del horno. Tomada esta mañana en la Plaza de Santa Marta. En un paseo que me he dado aprovechando que el día, aunque frío estaba sereno y con buena luz.

Canon EOS 10D
EF 70-210/3,5-4,5 USM
Focal: 70mm
ISO 400
Exposición: f/5,6 - 1/250s

sábado, enero 12, 2008

Noticias del sábado: Poca cosa en la prensa, la inteligencia de Felipe González, y a vueltas con la letra del "chunta"

Pues la verdad es que el quiosco está tranquilo. No aparecen grandes conmociones periodísticas en la portada de la prensa electrónica. Algunos coletazos del asunto de las rehenes de las FARC, cositas sobre Iraq, y algún asunto sobre la política antiterrorista. Nada que no hayamos oído ya.

Por otra parte, mientras preparo esta anotación, oigo como entrevistan en la radio a Felipe González. Siempre me dio un poco de miedo, porque es el político más inteligente que ha habido en los principales puestos de responsabilidad del Estado. Y sigue siendo inteligente. Pero siempre hubo acciones y tendencias en su política que no me gustaron. Pero es interesante escucharle, muy interesante.

Y en medio de todo, el guirigay a costa de "la letra del himno". Y todo porque llegan dos organizaciones, el COE y la SGAE, que deben tener poco que hacer. Que no representan ni de lejos a una mayoría social, se meten a faroleros y deciden montar un concurso para dotar del letra al himno español. Creo que alguna vez he hecho ya reflexiones al respecto, pero resumo mis opiniones:

  1. La inmensa mayoría de las letras de los himnos nacionales son horribles, casposas, antidemocráticas y chabacanas. Y esto no cambia por el hecho de que aparezca la palabra "democracia" en la letra.

  2. Al contrario que a algunos, el ver a una multitud en un campo de fútbol o de cualquier otro deporte, vociferando como posesos estas letras no produce ninguna emoción positiva. Me horroriza la capacidad del ser humano para someterse al rebaño cuando se invocan instintos primarios, tribalistas y excluyentes, que lo enfrentan a otros seres humanos.

  3. El himno español no es un himno. Es una marcha militar. No está pensada para llevar una letra. Está pensada para marcar el paso a una unidad militar del siglo XVIII. Esto garantiza que casi cualquier letra que se le quiera poner quedará mal. Tan chabacana como la que más.

  4. La iniciativa de estas organizaciones no tiene por qué llegar a nada. Probablemente, no deba. Una iniciativa de este tipo tiene que salir de un sitio serio.

Dicho esto, la letra "ganadora" del concurso es sencillamente horrible, con unos "vivaespañas" que nos retrotraen a alguna de las más famosas "obras" del franquista Pemán. El escuchar ayer al presidente del jurado asegurar que a pesar de todo era lo mejor que había, da idea de a qué tipo de "autores" ha convocado la estúpida iniciativa del COE y de la SGAE. Y el propio presidente del jurado puso algún ejemplo de que esto ha sido así.

Entonces, por favor, dejen todo como está. Si no queda más remedio que haya una pieza musical que en el protocolo represente al país. Pues ya está. Ya hay una. Pero no lleven la cosa al ridículo más espantoso. Que el himno español no tenga letra no debería ser considerado como un algo malo. Al contrario, esa ventaja que tenemos frente a las tonterías que cantan el resto de los países.

En la imagen de hoy, y siguiendo la línea de ayer, una ilustración basada en un fotografía tomada en Dresde (Alemania) hace tres meses.

Fotografía original tomada
con una Fujifilm FinePix F10

viernes, enero 11, 2008

Aprendiendo nuevas técnicas: Ilustraciones

Leyendo ayer el último penúltimo número de Shutterbug, me decidí a ensayar una técnica que explica para convertir fotografías en ilustraciones. Por lo que explicaba, decidí que algunas fotos de mis vacaciones del pasado verano en Tallinn, Estonia, podrían ser adecuadas. El resultado no está mal. Quedan como si fueran viñetas de un cómic, con trazos muy limpios y colores imitando a la acuarela.

Os dejo unos ejemplo, a ver si os gustan.



Originales tomados con una
Panasonic Lumix DMC-LX2

jueves, enero 10, 2008

Propósito cumplido y nuevas formas de suscribirse y leer revistas

Comentaba el día de Año Nuevo que, en principio, un único propósito me había hecho para el 2008. Completar mi colección de álbumes de Tintín en idioma original. Pues eso. Como adelantaba, el propósito se ha hecho realidad en los primeros días de enero. Hace dos días me llegaron los tres álbumes que me faltaban, que ya lucen en mis estanterías junto a los 21 restantes.

Pero ese mismo día, mientras redactaba la entrada sobre el fallecimiento de Herbert Keppler, vi en las páginas en internet de Popular Photography & Imaging y American Photo, que estas revistas se encontraban disponibles para su suscripción digital. Sin formato físico en papel. Para ser leídas en el monitor del ordenador. Son distribuidas electrónicamente por Zinio. Después de probar con una revista de muestra decidí suscribirme. A 10 dolares la suscripción anual; 12 números de PP&I y 8 números de AmPHOTO. Es decir, aproximadamente 6,80 euros. Teniendo en cuenta que un número de cada una estas revistas cuesta entorno a 6 euros en los quioscos españoles, que en España llegan unas tres semanas más tarde que a los quioscos norteamericanos, que desaparece el problema de luego acumular o tener que tirar todo ese papel... el inconveniente de hojearlas en la pantalla del ordenador resulta pequeño. Sobre todo porque es un inconveniente muy relativo.

Ale pues, más propósitos para este año. Gastar menos dinero en revistas, y ser más ecológico malgastando menos papel. Y... zas... propósito cumplido. Ufff, estoy que me salgo.

Llevamos unos días sin ver el sol por Zaragoza o Huesca, entre nublado y nieblas. Así que me consuelo con esta primaveral fotografía en los parques eólicos de La Muela (Zaragoza), tomada hace casi dos años.

Canon EOS D60 Tokina 12-24/4 AT-X 124 AF Pro DX ISO 100

martes, enero 08, 2008

Cómo me aficioné a leer Popular Photography: en memoria de Herbert Keppler

Hace ya una más que respetable cantidad de años, varios lustros, paseando como iba por la Plaza de San Francisco de Zaragoza, donde hay uno de los quioscos de prensa más interesantes de la ciudad, me llamó la atención la portada de algunas revistas de fotografía en idiomas extranjeros. Así que compre varias. No conocía ninguna. Durante unos días hojeé revistas británicas, francesas o norteamericanas. Unas me gustaron más y otras menos. Pero llegué a la conclusión de que rellenaban huecos con los magros medios de las hispanas quedaban en la literatura periódica especializada sobre el tema en el idioma de Cervantes.

Entre ellas se encontraba un ejemplar de Popular Photography. Esta revista goza/gozaba de gran prestigio. Según con quién hablas utiliza el presente o el pretérito. A mí me parecía un poco rollo algunas cosas. Por ejemplo, está llena de cartoncillos para que te suscribas que no hacen más que molestar. Una lata; y además, más basura. Hay un montón de páginas al final que sólo son publicidad. Pero muchos artículos previos terminan intercalados entre ellas. Y no son fáciles de encontrar a veces. No todas las páginas llevan el número de página. También pasa que responde mucho a idiosincrasias muy norteamericanas. Y eso a veces es bueno... y otras veces... estos yanquis me parecen marcianos. En cualquier caso es muy práctica. Y especialmene me llamó la atención un artículo que firmaba un tal Herbert Keppler.

El artículo se dedicaba a diversos aspectos práctico vinculados a la práctica fotográfica con una cámara réflex. Estaba encabezado por la fotografía de un señor, ya mayor, de aspecto enjuto. Muy sonriente. Parecía simpático. Desde entonces he comprado muchos número de la revista, y siempre lo primero suele ser leer el artículo de Keppler. He aprendido mucho con él. Sobre todo a ser práctico. A sacar partido al equipo, que no tiene por qué ser de campanillas. A saber que cosas son importante y cuáles no, sin dejarse llevar por el relumbron de lo tecnológicamente nuevo. Y siempre aparecía la foto de ese señor tan simpático, siempre tocado con diversos sombreros.

Hoy me enteró por aquí y por allá de que Herbert Kepler ha fallecido. Tenía ya 82 años. Ya no podremos volver a leer sus artículos más. El último que tengo es el del mes de diciembre de 2007. Tal vez venga alguno en el de enero de 2008, que hará unas semanas que estará en los quioscos norteamericanos, pero que todavía no había llegado aquí. Si podéis leer el inglés, no dejéis de leer el obituario en Popular Photography. Como comprobaréis fue alguien que influyó notablemente en como son nuestras cámaras hoy en día.

He vuelto a leer el artíuculo del mes de diciembre. Compara a la Leica I(A) de 1925 con la Canon EOS 1D Mark IIN. Lo que es tener un gran sentido del humor. Y cuando lees lo que dice... y una gran sentido común.

En la filosofía de Kepler estaba el aprovechamiento de viejas pero honorables ópticas de antaño. Así, la foto de hoy, tomada en la Ciudad de las Artes y de las Ciencias de Valencia, marida un viejo 100mm macro de Pentax con una moderna réflex digital de la marca.

Pentax *ist DS
SMC-A 100/4 Macro
ISO 200
Exposición: f/8- 1/640s

lunes, enero 07, 2008

El espía (2007)

El espía (Breach, 2007), 6 de enero de 2008

Nos vamos en una tarde tonta de Reyes, en un puente forzado por la coincidencia de esta festividad con un domingo, a ver una película que había quedado sepultada en la profundidad de un intratable cartelera navideña. Una de espías. Pero sin acción. Espías de verdad, no estilo 007.

La película está dirigida con corrección técnica por Billy Ray. Es su segundo largometraje como director, pero el primero que veo yo. Tiene una lista relativamente larga de filmes en los que ha firmado como guionista, pero tampoco he encontrado grandes cosas. En cualquier caso, hay solvencia en la dirección, ya que la película tiene un aspecto visual muy conseguido y la historia va transcurriendo con un ritmo razonable. Dado que se trata de una película basada en hechos históricos, el final resulta previsible, por lo que el principal interés resulta más en el retrato de los personajes que en otra cosa.

Por lo tanto, es imprescindible hablar de los actores que deben componer este retrato. En primer lugar, decir que el veterano agente que es vigilado por espía está interpretado por Chris Cooper, un más que solvente actor, generalmente en tareas de secundario, pero que siempre me ha parecido muy bien. Realmente, consigue un retrato muy convincente del personaje, con algún momento de bastante intensidad. Se ve enfrentado a un joven funcionario de la agencia interpretado por Ryan Philippe. Está bien. Pero como tuve la mala suerte de encontrármelo en alguna película para adolescentes hace tiempo, en ningún momento pude quitarme esta imagen de mi cabeza. Es injusto, lo sé. Porque lo he visto en otros filmes, donde no me ha pasado esto. Pero en éste sí. Como catalizador a esta relación está la solvente y para mí infravalorada Laura Linney. Casi siempre me gusta esta actriz.

En resumen, una película correctamente dirigida y muy bien interpretada. Pero que no me acaba de emocionar. La verdad es que en el fondo, durante la película me da un poco igual lo que les pase a los personajes. Quizá porque todo está muy planteado para que de entrada y de forma muy maniquea unos te caigan muy bien y otros muy mal. Con esto, pierden interés y además ya supones por donde van a ir los tiros.

No obstante, no pasa nada por ir a verla y entretiene. Le pongo un siete en dirección y un ocho en interpretación. Lo que pasa que no le daré más de un seis a mi valoración subjetiva.

La imagen de hoy, la abstracción del agua que discurre por una fuente de marmol.

Pentax K10D
SMC-A 100/4
ISO 100
Exposición: f/5,6 - 1/640s

domingo, enero 06, 2008

Pues se van acabando las fiestas de Navidad-Fin de Año

Este año me he dedicado mucho a labores domésticas. Cambiar algún mueble, volver a ordenar los libros, y cosas por el estilo. Además hizo días malos para salir ni a pasear. En resumen, que como consecuencia de todo esto, no he salido a fotografiar mucho que digamos.

Pero el viernes, que tenía casi todo el trabajo doméstico hecho, que tenía que salir a comprar alguna tontada al centro, cogí una cámara y tomé algunas imágenes con tono navideño. Pocas pero alguna.

Este año da la impresión de que se va apagando la moda de los papanoeles trepadores. Parece que se ven menos, pero alguno se ve.

Lo que no falla es que la gente compra. En los comercios de toda la vida, en las grandes superficies, en los chiringuitos en la calle, en cualquier sitio donde se venda algo, por zarrioso que sea.

También es el primer año que me meto a curiosear por el belén a tamaño natural que instalan en la plaza del Pilar. La verdad es que me decepcionó. Como siempre había visto entrar tanta gente, con largas filas en los días festivos, pensaba que era otra cosa, pero me resultó muy tosco. No sé... deberían encargar las figuras a algún escultor más fino.

Bueno. El tema tampoco dio para más. Que había cosas que comprar. Lo que importa son dos cosas. Una positiva y otra negativa. La positiva es que se acaban unas fiestas que desde hace años me parecen una pesadez. La negativa es que he tenido una semana larga de fiesta, y el martes hay que volver al curro. En fin, resignación.

Todas las fotos: Pentax K10D, con SMC-DA 21/3,2, SMC-A 50/2 y SMC-A 100/4

sábado, enero 05, 2008

Noticias del sábado: el cumpleaños del Borbón, la trifulca de los obispos y ese misterioso aquelarre que se llama caucus

Es víspera de Reyes. No los de carne y hueso, sino esos misteriosos magos que vienen de algún sitio del desventurado Oriente para traer regalos. ¿No deberían dejárselos a los niños de ese Oriente, mucho más atribulado y empobrecido que el obeso Occidente? El ser víspera de Reyes nos obliga todos los años a escuchar noticias de otro Rey, el de aquí, el Borbón, el que apenas sabe articular las palabras que pronuncia, pero que tantos partidarios ha reunido a base de detalles puntuales que han convencido a buena parte de la Nación de lo demócratas y constitucionales que son los Borbones. ¡Qué poca historia sabe la Nación! Cumple 70 "tacos". ¿A qué edad se jubilan los reyes? Claro que... a lo mejor hay miedo a que la gente sea más "juancarlista" que monárquica, y que el entusiasmo se enfríe con los sucesores. En cualquier caso, haya paz.

Se sigue comentando las necedades antidemocráticas que suelta la Conferencia Episcopal. Oigo en la radio que hay muchos que plantean la necesidad de modificar los Acuerdos Iglesia-Estado. Si gana la derecha, no lo harán. Si gana la menos derecha, ya han demostrado que no tienen lo que hay que tener para ello. Y no me refiere a la carencia de algún tipo de gónada u otro tipo de órgano físico. Me refiero a la carencia de valor y convencimiento democrático, a la ignorancia de que la razón del derecho está con ellos para variar por completo el absurdo estatus que todavía conserva la Iglesia Católica en el ordenamiento jurídico español. Algo inaudito en el resto de la Europa Occidental.

En la metrópoli han comenzado su largo y farragoso proceso electoral. Desde hace unas décadas, todo comienza oficialmente en el estado de Iowa. Este modesto estado del Medio Oeste norteamericano sale poco en la prensa, salvo una vez cada cuatro años en la primera semana de enero, gracias a sus famosos caucus. Un caucus es un proceso semiasambleario para decidir representantes en los procesos de nombramiento de candidatos a la presidencia y otros órganos electos en los Estados Unidos. Es cuando menos curioso. Recomiendo leer el pequeño artículo que se publicaba ayer en Público.es para ver un poco el ambiente que tiene. En cualquier caso, parece que este año debería ser el de la vuelta de los Demócratas al poder. Pero ya veremos quien.

En la imagen de hoy, un detalle tomada al azar por las calles de Zaragoza.

Pentax K10D
SMC-A 50/2
ISO 100
Exposición: f/13 - 1/100s

viernes, enero 04, 2008

Un "goof" en American Gangster

Ya decía ayer lo mucho que me había gustado la última película estrenada de Ridley Scott, American Gangster. Como soy aficionado al cine, no puede evitar durante la película en fijarme en el diverso material fotográfico que aparece en el filme.

En un momento dado, observé que buena parte de las cámaras fotográficas réflex lucían sobre su pentaprisma la inscripción "Asahi Pentax". Esto estimuló mi curiosidad, ya que desde mi primera cámara réflex, he sido usuario de Pentax, en otras marcas. Después de varias apariciones en pantalla, en una de las cuales se veía parte de una inscripción frontal con varios ceros. Algo así como "...000". No se veía completa, de ahí los puntos suspensivos. Pero estoy prácticamente seguro de que se veían esos ceros. Entonces recordé que una de las cámaras de recorrido comercial más longevo de la historia de Asahi Pentax fue la K1000, y que esta robusta y austera cámara fue una de las preferidas por los cuerpos de policía norteamericanos, por ser económica, resistente y sencilla de utilizar. Y me quedé satisfecho... hasta que se me puso la mosca detrás de la oreja. La Pentax K1000 fue una cámara que comenzó a fabricarse bien entrada la década de los 70, en concreto en el año 1976, aguantando hasta casi la era digital, ya que dejó de fabricarse en 1997.

Con estos datos, y teniendo en cuenta que la acción de la película transcurre aproximadamente entre 1969 y 1973, da la impresión de que nos encontramos ante lo que los angloparlantes llaman un goof. Un error en la película, en este caso por el anacronismo entre la época y la cámara fotográfica.

Como en estas cosas hay que asegurarse, he consultado en diversas fuentes (Asahi Pentax and Pentax SLR 35 mm cameras 1952 -1989, Danilo Cecchi, Hove Foto Books; Bojidar Dimitrov's Pentax K-Mount Page; Wikipedia) para ver si en la época de la película podría haber otra cámara que respondiera a las características vistas. He comprobado que hubo una cámara que reunía las características de la K1000 en la época de las Asahi Pentax Spotmatic, que sería coherente con la época del filme. Se trataba de la Spotmatic SP1000, de la que la K1000 sería descendiente. La primera tuvo su montura de rosca, mientras que la K1000 tuvo por montura la bayoneta K de Pentax. Lo que pasa es que donde yo vi los ceros, en la SP1000 encontramos la inscripción "SPOTMATIC". Salvo que me haya engañado la vista, no se trata de esta cámara, sino de la K1000, y por lo tanto nos encontramos ante un "goof". Un error, vamos.

Pues nada. Ya lo sabéis. Pero vamos... por lo demás, este detalle no desmerece la película. Supongo que pensaron que la K1000 parecería lo suficientemente antigua, y que pocos se preocuparían de este detalle.

En la imagen de hoy, os subo una foto de los tiempos de las diapositivas. Como en estos días que he estado de fiesta he ordenado un poco mis posesiones, ha aparecido un carrete de diapositivas con imágenes del Museo del Ferrocarril de Villanueva y Geltrú (Barcelona). Y aquí os dejo esta estupenda "Verraco".

Canon EOS 100
Película diapositiva 100 ISO
Exposición no registrada

jueves, enero 03, 2008

American Gangster (2007)

American Gangster (2007), 2 de enero de 2007.

En un día feo, frío y húmedo como pocos, nos vamos a ver la última de Ridley Scott. Ir a ver una película de este director es algo que siempre me produce sensaciones contradictorias. Apenas hace uno días, disfrutaba de la ultimísima y parece que definitiva versión de Blade Runner. La verdad es que me da igual la versión... me parece una de las mejores películas de la historia. Obsérvese que no incluyo la coletilla "de ciencia ficción" en la frase anterior. Pero claro... también flirteó con la teniente O'Neil; una catástrofe.

La película es una mezcla de dos arquetipos cinematográficos; las películas de mafias y las películas de poli contra malo que apenas se ven pero que están de forma consciente o inconsciente enfrentados casi personalmente. De las primeras hay muchos ejemplo, desde la colosal El Padrino hasta la última de Scorsese, Infiltrados, también muy notable. El filme que hoy nos ocupa bebe de esas abundantes y ricas fuentes. De las segundas, siempre tengo en mente esa maravilla de Michael Mann que es Heat. La base de estas películas es el enfrentamiento actoral entre dos grandes que muchas veces apenas coinciden en la misma escena. También hay mucho de esas historias en la que ayer contemplamos.

Pero dicho esto, la película es una concepción original, independiente de las influencias que la preceden. Asistimos a la ascensión de un gánster, interpretado por Denzel Washington, desde su humilde condición de sicario, ignorado por todos, hasta colocarse en la cima de la pirámide alimenticia del crimen organizado. También asistimos al purgatorio de un policia, encarnado por el australiano Russell Crowe, que por diversos motivos, uno de los cuales es su peculiar honradez, va circulando por la vida dando tumbos hasta que encuentra su sitio en la persecución del tráfico de drogas y en su consecución de la licencia de abogado. Ambas trayectorias confluyen finalmente en un final, que si no es espectacular, si que es muy adecuado. Todo ello está perfectamente insertado en el guión que, a pesar de su larga duración, fluye sin problemas por la historia.

Ambos protagonistas están en estado de gracia. La verdad es que Washington está sobrio como no lo había estado en algunos de sus últimos papeles. Y esa sobriedad, con la elegancia que conlleva, es una de sus marcas de clase, de su identidad como actor. El australiano, una vez más, se vuelve mucho más competente cuando se vuelve tosco, bruto, débil que cuando va de apetitoso solomillo de carne. Está también perfecto en su papel. Hay una pléyade de actores secundarios que cumplen a la perfección y otorgan a la película una de sus principales fortalezas; la interpretación.

En resumen, una película altamente recomendable, especialmente para los aficionados a las "pelis" de mafiosos. Yo le planto un ocho, con un nueve a la interpretación y otro ocho a la dirección. Dicho queda.

La fotografía de hoy, arte callejero por el Casco Viejo de Zaragoza.

Fujifilm FinePix F10
Focal: 8mm
ISO 100
Exposición: f/2,8 - 1/200s

martes, enero 01, 2008

Propósitos de Año Nuevo

Se supone que el Año Nuevo es un momento idóneo para plantearse propósitos de mejora personal de cara a la ronda solar que se avecina. Yo nunca he sido muy dado a estas cosas. La elección del Año Nuevo en la fecha que es me resulta demasiado arbitraria como para darle una importancia trascendental. De hecho, siempre he pensado que el año nuevo debiera ser, por lo menos en el hemisferio norte, en algún momento en torno al 1 de julio para mejorar la experiencia festiva. No sé que sentido tiene montar semejante movida cuando puede hacer un frío que pela. La niebla que se ha echado esta noche sobre Zaragoza daba miedo.

Pero siempre hay gente que se plantea propósitos graciosos. O lo más importante, realistas y factibles. No olvidemos que la mayor parte de las personas que se proponen dejar de fumar, han recaído antes del 31 de enero... y es que la carne es débil, y la voluntad más.

Entre los blogueros que han manifestado sus propósitos para el 2008, el que más gracia me ha hecho ha sido Microsiervos. Me gusta entre otras cosas, porque siempre nos tratan en este apreciado blog como si realmente fueramos inteligentes. Los seres humanos, digo. Para aquellos menos despiertos, seguir el enlace de la palabra procrastinar que aparece en la propia anotación... más allá, si no lo entienden...

Después de todas estas reflexiones, he decidido que yo también me voy a hacer un propósito para el Año Nuevo. Pero uno que realmente sea capaz de cumplir, que yo siempre he sido más partidario de la pedagogía del éxito que de la del fracaso. Así que como ayer estuve reorganizando mi biblioteca, comprobé que me faltan dos tintines para completar mi colección de estas joyas. Los tengo casi todos en versión original en francés. Y ya va siendo hora de tenerlos todos. Así que me voy de inmediato a Amazon.fr, para encargarlos. Con lo cual, éxito completo en mis propósitos para el 2008. Y pronto. Para luego ir más relajado ante las cornadas que seguro que nos dará el bisiesto. Que es lo que tienen los años. Que no sólo nos traen las alegrías asociadas al día 1 de enero.

En honor al belga Hergé, hoy os pongo una foto de la Rue des Bouchers tomada en Bruselas hace ya seis años y medio.

Canon EOS 100
EF 28-135/3,5-5,6 IS USM
Película diapositiva 100 ISO
Exposición no registrada